Después de un día largo lo primero que hacemos cuando llegamos a casa es buscar nuestras zapatillas, babuchas, pantuflas, alpargatas, chinelas… Y es que las llames como las llames, todos estamos de acuerdo en la importancia de escoger bien para andar bien cómodos por casa.

El uso de plantillas ortopédicas cada día es más frecuente y por este motivo la industria del calzado trabaja constantemente para desarrollar diferentes tipos de calzado compatibles con el uso de éstas.

Llega el buen tiempo y esto significa aparcar nuestras botas, botines y demás calzado de invierno y empezar a sacar nuestro calzado de primavera y verano. Al igual que hacemos con la ropa, el calzado también necesita un “cambio de armario” pero antes hay unas normas básicas que debemos seguir:

Las modas cambian con los años, pero estos cambios son cíclicos.

Ha quedado demostrado que las modas pasadas vuelven a ser tendencia, como es el caso de las zapatillas blancas, pero sabes cómo empezó la moda de las zapatillas blancas?

Levantarse por la mañana, ver qué está lloviendo y pensar… ¿y ahora, qué zapatos me pongo? Esta es sin duda la pregunta clave que nos hacemos al echar un vistazo a nuestro calzado.